El sueño de la casa propia es una meta que la mayoría de la gente desea alcanzar. Sin embargo, la piedra de tope a veces suele ser el cómo ahorrar para lograr este propósito, y es que para muchos esto se torna complicado, partiendo por el ahorro del dinero para el pie.
Pero ¿qué es el pie para una casa?
Generalmente las personas no compran las casas al contado, pues su costo es muy elevado y la mayoría no cuenta con esa cantidad de dinero al instante. Por eso, las entidades bancarias ofrecen créditos hipotecarios que permiten pagar la casa en cuotas durante un período determinado de tiempo.
Sin embargo, el crédito no suele ser del 100%, y parte del total del valor de la propiedad debe ser pagada en el momento de la compra con tus ahorros. Ese porcentaje que el crédito hipotecario no cubre es el pie para una casa. Por ejemplo, si un inmueble cuesta 100 millones de pesos, y el banco te ofrece un crédito hipotecario del 80%, tendrás que contar con un pie de 20 millones.
Indudablemente se trata de una gran suma de dinero, por lo que cuando se quiere adquirir una propiedad es indispensable contar con el ahorro suficiente para pagar el pie.
¿Cómo ahorrar para el pie?
Existen diversas maneras de obtener el dinero necesario para el pie destinado a la ansiada casa propia, y la más importante de todas es el ahorro, pero ¿cómo hacerlo? Toma en cuenta los siguientes consejos:
Separar gastos
Organizar el dinero es esencial cuando se tiene un propósito específico, como cuando se paga el pie de una propiedad. Por eso, lo ideal es dividir el dinero apenas llegue a tus manos cada mes, destinando un porcentaje al ahorro según tu capacidad económica. Mientras más puedas separar para el ahorro, por supuesto, más rápido podrás cumplir la meta.
Reducir gastos innecesarios
Siempre hay algún ítem dentro de los gastos del mes del que se puede prescindir o al menos, reducir. Por ejemplo, cambiar el plan del celular por uno más económico, eliminar el TV cable, pedir menos comida a domicilio y cocinar más en casa, ducharse menos tiempo, caminar o utilizar la bicicleta en lugar del auto o el transporte público (si es que es posible), etc.
La idea es analizar los gastos que tienes cada mes, y enfocarte en aquellos que puedan ser modificados para ahorrar más.
Vender artículos en desuso
Seguro tienes más de alguna cosa que está ocupando espacio en tu casa porque no la usas. Al respecto, vender cosas que no utilices tiene un doble beneficio: despejas tu casa y ganas un dinero extra que servirá para aumentar tus ahorros de cara a cumplir el sueño de la vivienda propia.
Hacer algún trabajo extra
Si tu tiempo te lo permite, puedes ver la posibilidad de buscar un segundo trabajo, que puede ser desde hacer clases en algún área que domines hasta fabricar o revender productos.
Además de los consejos de ahorro que acabas de revisar, también puedes considerar la compra en blanco o verde. Al adquirir una propiedad bajo estas modalidades, las inmobiliarias pueden ofrecer la opción de pagar el pie en cuotas, con un interés menor o incluso sin intereses.
Ahorrar es el primer paso para adquirir tu vivienda. Una vez que tengas ese dinero, busca la asesoría de expertos para cumplir el sueño de ser propietario.